Prevención y tratamiento de los queloides

Los queloides son cicatrices más grandes de lo normal, que se expanden más allá de los bordes de la herida original. Conoce los diferentes tratamientos que existen.

Un queloide es una cicatriz anormal que también puede causar picazón, dolor y se extiende más allá de los bordes originales de la lesión cutánea. Hay muchas formas de tratar los queloides, pero si sabe que es probable que forme queloides, la estrategia más eficaz es prevenir la formación de queloides en primer lugar.

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Cómo prevenir la formación de queloides

Puede prevenir la formación de queloides evitando lesiones en la piel como:

  • cortes
  • cirugía
  • perforación del cuerpo
  • infección
  • acné

Si forma queloides en respuesta al acné, es importante tratar el acné rápidamente y usar medicamentos para ayudar a prevenir su reaparición. Si tiene acné, evite afeitarse el cuello y la cara, ya que hacerlo puede irritarlo y estimular la formación de más queloides. En su lugar, use tijeras para recortar su vello facial. Mantenga los pelos de al menos un octavo de pulgada de largo.

Además, el tratamiento adecuado de las heridas puede ayudar a minimizar la formación de cicatrices y, a su vez, reducir la formación de queloides. Trate de mantener sus heridas húmedas con vaselina y cúbralas con un vendaje antiadherente. Mantenga su cicatriz oculta del sol durante al menos los primeros tres meses después de una lesión para evitar un oscurecimiento excesivo de la cicatriz.

Tratamientos queloides

Existen numerosos tratamientos disponibles para los queloides:

  • Corticosteroides intralesionales (inyectados)
  • Excisión
  • Láminas de gel de silicona
  • Criocirugía
  • Pendientes de presión
  • Radioterapia
  • Interferón alfa
  • Terapia con láser
  • Inyección de fluorouracilo

Un dermatólogo, un cirujano plástico facial o un cirujano plástico pueden recomendar uno o una combinación de estos tratamientos. Es importante tener en cuenta que los queloides pueden reaparecer después del tratamiento. Trate sus queloides lo antes posible, ya que esto aumenta las posibilidades de que respondan al tratamiento.

Corticosteroides intralesionales

Los corticosteroides intralesionales (inyectados) suelen ser el primer tipo de terapia recomendada para el tratamiento de los queloides. Se usa una aguja para inyectar un esteroide, típicamente triamcinolona, directamente en el queloide. Puede aplicarse nitrógeno líquido antes de la inyección. Las inyecciones se repiten todos los meses hasta que el queloide se vuelve más plano y suave. Un estudio mostró una reducción del 82,7 por ciento en el tamaño de la cicatriz tres meses después de la última inyección. El tratamiento se puede combinar con otras terapias para obtener mejores resultados.

Escisión quirúrgica

En una escisión quirúrgica, se usa un bisturí (una cuchilla quirúrgica afilada) para eliminar el queloide. La triamcinolona u otro medicamento llamado interferón a menudo se inyecta antes, durante o después de la escisión. La inyección de triamcinolona alrededor del momento de la cirugía ayuda a prevenir la reaparición del queloide.

Láminas de gel de silicona

Las láminas de gel de silicona son láminas transparentes y pegajosas que se colocan sobre las cicatrices. Permiten que el oxígeno pase y ayudan a mantener un ambiente húmedo para mejorar la curación. Pueden ayudar a reducir el dolor o la picazón de los queloides y prevenir el crecimiento de queloides nuevos o existentes. Para una eficacia óptima, las láminas de gel de silicona deben usarse durante al menos tres meses y al menos cuatro horas al día. Están disponibles con receta o sin receta y deben cortarse al tamaño de un queloide y pegarse con cinta adhesiva en su lugar. La sábana debe lavarse a diario y reemplazarse de acuerdo con las instrucciones del fabricante.

Criocirugía

Esto se refiere al uso de nitrógeno líquido rociado sobre su queloide durante dos sesiones de 15 segundos. Esta terapia se puede repetir hasta seis veces y, a menudo, se combina con otros tratamientos. Es importante tener en cuenta que en pacientes con piel más oscura, la piel tratada con nitrógeno líquido puede volverse más clara o más oscura.

Pendientes de presión

Estos son aretes especiales económicos personalizados para usted que comprimen el lóbulo de su oreja. Se colocan sobre el lóbulo de la oreja inmediatamente después de la perforación para evitar que se forme un queloide.

Radioterapia

Se aplica un haz de rayos X externo a un queloide. La radioterapia puede evitar que un queloide vuelva a crecer después de haber sido extirpado quirúrgicamente en la mayoría de los pacientes. Aunque cualquier exposición a la radiación aumenta el riesgo de cáncer, la cantidad que se usa para tratar los queloides generalmente se considera muy segura.

Interferón-Alfa

El interferón alfa son proteínas liberadas por las células para ayudar a activar el sistema inmunológico. Se pueden inyectar después de extirpar quirúrgicamente un queloide para prevenir la recurrencia. Aunque es una terapia cara, las investigaciones sugieren que puede tener efectos prometedores, especialmente en las cicatrices resistentes a otras formas de tratamiento.

Fluorouracilo intralesional

Este es un fármaco quimioterapéutico que se inyecta en los queloides. Trata los queloides bloqueando la replicación del ADN. Esto evita que los fibroblastos, las células que crecen en exceso en un queloide, se reproduzcan. Algunos pacientes informan ulceración y dolor como efectos secundarios. Este tratamiento también se puede combinar con inyecciones de corticosteroides intralesionales.

Láser de colorante pulsado

Un láser de colorante pulsado es un láser que se ha demostrado que mejora los queloides y es especialmente útil para los queloides rojizos y las cicatrices. También se han utilizado otros láseres, como los láseres fraccionados, para tratar los queloides. El tratamiento con láser se puede realizar en combinación con una inyección intralesional de corticosteroides o fluorouracilo.