Los fundamentos del cuidado de la piel saludable

El cuidado de la piel debe ser simple y no debe requerir un proceso diario de 10 pasos. Estas son las tres cosas que debe hacer por su piel todos los días.

Un buen cuidado de la piel no tiene por qué ser complicado. Consta de tres pasos básicos: limpieza, hidratación y protección solar.

Entonces, ¿por qué a menudo se siente abrumado por todos los comerciales que afirman que sus lociones harán que su piel se vea y se sienta mucho mejor? ¿Se rasca la cabeza confundido con todas las opciones en el pasillo del cuidado de la piel? Si es así, no estás solo.

De hecho, una encuesta realizada por la Liga Nacional de Consumidores (NCL) y Harris Interactive concluyó que seis de cada 10 consumidores están confundidos acerca de la efectividad y / o seguridad de estos productos.

La buena noticia es que lavarse la cara no tiene por qué ser un proceso de 10 pasos y no tiene que gastar mucho dinero en llenar su botiquín. La simple verdad es que un buen cuidado de la piel implica los siguientes pasos:

  • Limpiar la piel para eliminar de forma segura la suciedad, los productos químicos y las toxinas.
  • Hidratante para hidratar y reponer la piel.
  • Aplicar protector solar para proteger la piel de los dañinos rayos ultravioleta.

Los fundamentos de la limpieza

La mayoría de nosotros sabemos que la limpieza es una parte importante del buen cuidado de la piel. El propósito de un limpiador es rodear, aflojar y facilitar la eliminación fácil de la suciedad, los escombros, los gérmenes y el exceso de grasa en la superficie de la piel. Sin embargo, algunos limpiadores son mejores que otros. De hecho, puede tener efectos nocivos sobre la piel.

Algunas personas, por ejemplo, pueden desarrollar piel seca como resultado directo de su rutina de limpieza diaria. Pueden creer que su piel solo está limpia cuando se siente firme y crujiente después del lavado. Como resultado, se acostumbran a la idea de tener manchas ásperas en el dorso de las manos, picazón en el invierno o una tez despareja y opaca.

Entonces, la pregunta es la siguiente: ¿cómo saber qué tipo de limpiador es el adecuado para usted? El primer paso es comprender sus opciones.

  • Los jabones en barra son los limpiadores más comunes, pero generalmente los más irritantes.
  • Los limpiadores líquidos ofrecen una amplia variedad de tolerabilidad, pero a menudo resultan en untuosidad.
  • Los limpiadores faciales se encuentran entre los limpiadores más suaves, pero es posible que no eliminen todo el aceite y la suciedad.

La conclusión es que cuando se trata de elegir su limpiador, comience con la opción más suave posible. Solo necesita eliminar la suciedad, los escombros y el exceso de grasa sin quitar la humedad natural de la piel.

Los limpiadores faciales sin espuma se consideran los más suaves, mientras que los exfoliantes faciales ofrecen más en cuanto a eliminación de suciedad y piel muerta. Si bien algunos limpiadores líquidos también hacen un buen trabajo, esté atento a cualquier ingrediente (como aceite de soja o petróleo) que pueda dejar la piel con una sensación grasosa. Los jabones Syndet se encuentran entre las opciones en barra más suaves, al igual que algunos jabones en barra "supergrasos".

Los fundamentos de la hidratación

La hidratación es un paso esencial para un buen cuidado de la piel. Una crema hidratante bien elegida evitará que el ciclo de la piel seca se convierta en una piel agrietada, gruesa y escamosa. Las mejores opciones suelen tener una combinación de ingredientes que:

  • Reabastece la piel para ayudar a mantener su estructura natural, equilibrio de pH, etc.
  • Reducir el daño de los radicales libres
  • Ayuda a que las células de la piel funcionen con más normalidad.

Los humectantes de antaño solían ser mezclas de agua y cera que funcionaban atrapando agua en la superficie de la piel (a menudo creando una sensación antinatural y resbaladiza). Por el contrario, los humectantes más nuevos y de última generación están hechos con ingredientes destinados a reponer la humedad natural de la piel, que incluyen:

  • Glicerol, que ayuda al agua y otros ingredientes humectantes a penetrar generalmente en la capa externa de la piel.
  • Ceramidas, que ayudan a reponer los aceites naturales de la piel.
  • Hidroxiácidos que ayudan con la exfoliación de las células muertas de la piel.
  • Niacinamida, que ayuda a la piel a producir aceites naturales y puede revertir algunos de los signos del daño solar.

La elección del mejor humectante depende de su tipo de piel (seca, grasa, normal, sensible) y de cualquier afección cutánea que pueda tener (como acné, rosácea, eccema o dermatitis atópica).

Si tiene problemas en la piel, no confíe en las etiquetas de los productos ni en los consejos del mostrador de belleza para hacer su elección. Reúnase con un dermatólogo que puede ofrecerle consejos sobre productos que abordan sus necesidades de belleza y cuidado de la piel.

Los fundamentos de la protección solar

El último paso de un buen programa de cuidado de la piel suele ser el más olvidado. La protección solar es hoy un componente imprescindible de cualquier rutina diaria de salud.

La exposición excesiva a la radiación ultravioleta puede dañar la piel (incluidas las quemaduras solares y el fotoenvejecimiento) y aumentar el riesgo de cáncer de piel. Y no se trata solo de evitar los bronceados o las largas caminatas al aire libre. Los daños pueden ocurrir en la vida cotidiana, incluso al caminar de la casa al automóvil o al sentarse junto a una ventana soleada. Cada poco de exposición puede acumularse a lo largo de los años, causando arrugas y manchas oscuras (o, en el peor de los casos, piel

Hay varios factores a considerar al elegir un protector solar:

  • El SPF (factor de protección solar)
  • Ya sea protector solar todos los días o al sol
  • Si contiene un humectante, que puede ayudar a evitar que la piel se seque.

También es importante comprender el índice UV al realizar su elección. El índice puede variar de un día a otro o de una región a otra, y un índice más alto sugiere un producto SPF más alto.

Incluso después de aplicar protector solar, es importante evitar la exposición excesiva y cubrir aquellas partes de su cuerpo que tienden a quemarse. También es importante volver a aplicar el protector solar si nada o suda en exceso.

Has trabajado duro para cuidar tu piel limpiándola e hidratándola. No lo deshagas dejándolo expuesto a los efectos del sol. Encuentra un buen protector solar de amplio espectro y conviértelo en parte de tu rutina diaria como cepillarte los dientes. Si necesita más orientación, programe una cita con su dermatólogo o