La hepatitis es una enfermedad causada por la inflamación del hígado. Por lo general, es el resultado de una infección con un virus, pero también existen formas no virales de la enfermedad, incluida la hepatitis provocada por el uso de ciertas drogas, el abuso de alcohol y las enfermedades autoinmunes.
La hepatitis puede ser aguda (de unas pocas semanas a unos meses), causar pocos síntomas, si es que los hay, y desaparecer por sí sola. También puede ser crónica, lo que significa que la inflamación persiste durante seis meses o más. La hepatitis crónica puede provocar complicaciones graves e incluso potencialmente mortales, como cirrosis, cáncer de hígado e insuficiencia hepática.
Existen vacunas eficaces para dos de las formas virales: hepatitis A y hepatitis B.