¿Qué sucede si desarrolla la enfermedad de Hodgkin durante el embarazo? ¿Con qué frecuencia ocurre esto?
Linfoma de Hodgkin en el embarazo
El linfoma de Hodgkin afecta principalmente a personas jóvenes en la adolescencia y los 20 años, la misma edad en la que las mujeres suelen quedar embarazadas. Entonces, desarrollar la enfermedad de Hodgkin durante el embarazo no es tan inusual. Se estima que entre 1 de cada 1,000 y 1 de cada 6,000 mujeres se enfrentan a la pregunta de cómo manejar el linfoma de Hodgkin durante el embarazo.
Síntomas
Los síntomas del linfoma de Hodgkin pueden superponerse con los síntomas que asociamos con el embarazo. Algunos de estos síntomas incluyen cansancio, sudores nocturnos y picazón en la piel. Afortunadamente, la enfermedad de Hodgkin es muy curable y las personas diagnosticadas no tienen que preocuparse de retrasar su diagnóstico, pensando que los síntomas se deben únicamente al embarazo.
¿El linfoma de Hodgkin se comporta de manera diferente en mujeres embarazadas?
El linfoma de Hodgkin se comporta de la misma manera en las mujeres embarazadas que en las que no lo están. Es posible que haya escuchado rumores de que el embarazo puede "alimentar" el cáncer. Si bien ese puede ser el caso, por ejemplo, de un cáncer de mama dependiente de estrógenos, no es el caso de las mujeres con enfermedad de Hodgkin. El cáncer crece y se propaga de la misma manera, ya sea que esté embarazada o
Pruebas para mujeres embarazadas
Si está embarazada, es probable que su médico ordene diferentes pruebas para diagnosticar y estadificar su enfermedad que si no estuviera embarazada. Las radiografías, las tomografías computarizadas y las tomografías por emisión de positrones generalmente se evitan durante el embarazo para evitar la exposición del feto a la radiación. En su lugar, se utilizan escáneres de resonancia magnética; son igualmente buenos e inofensivos durante el embarazo. Las otras pruebas son similares y también lo son las etapas del linfoma de Hodgkin.
¿Es necesario un aborto?
Rara vez es necesario interrumpir un embarazo cuando a alguien se le diagnostica linfoma de Hodgkin. En la mayoría de los casos, el tratamiento se puede retrasar o modificar hasta que el bebé esté lo suficientemente maduro como para nacer con relativa seguridad. Solo si la enfermedad está tan avanzada que amenaza la vida de la madre o hace imposible un parto viable, se considera el aborto.
Tratamiento durante el embarazo
No existen reglas fijas sobre el tratamiento del linfoma durante el embarazo. La etapa del linfoma, el momento del embarazo y los deseos de la madre se tienen en cuenta al tomar la decisión de tratamiento. El tratamiento a menudo se retrasa o modifica para que se pueda obtener el mejor equilibrio entre el control de la enfermedad y la seguridad del feto.
El primer trimestre del embarazo: si se diagnostica Hodgkin durante el primer trimestre del embarazo, la intención es retrasar el tratamiento si es posible para evitar cualquier daño al feto. El bebé es más propenso a sufrir daños por los tratamientos contra el cáncer durante los primeros tres meses cuando se están formando sus órganos, especialmente durante el período de tiempo de 2 a 8 semanas después de la concepción. La quimioterapia es perjudicial en esta etapa y debe evitarse. La radiación también es dañina si llega al útero. Pero se puede administrar a áreas alejadas del útero (como el cuello o la parte superior del pecho) con una protección cuidadosa del abdomen de los rayos si es necesario comenzar el tratamiento. En la mayoría de las mujeres jóvenes diagnosticadas en una etapa temprana, es posible retrasar el tratamiento hasta llegar al segundo trimestre o incluso hasta que nazca su bebé.
El segundo y tercer trimestre del embarazo: el tratamiento del linfoma en la segunda mitad del embarazo es más fácil porque hay más opciones disponibles. Es más fácil esperar hasta que los pulmones del bebé maduren (y se vuelvan adecuados para el parto) y se administran esteroides para acelerar este proceso. Si es necesario iniciar el tratamiento, se pueden iniciar algunos medicamentos de quimioterapia sin un alto riesgo de daño al feto. De hecho, algunos estudios muestran que la combinación estándar de medicamentos de quimioterapia como ABVD puede administrarse de manera segura durante los últimos meses del embarazo. La radiación también se puede administrar a algunas áreas seleccionadas del cuerpo si el abdomen puede protegerse con cuidado.
Resultados del tratamiento
Los resultados de un estudio que siguió a los pacientes durante 20 años después del tratamiento mostraron que los resultados del tratamiento de las mujeres embarazadas con Hodgkin no fueron diferentes de los que no tenían la enfermedad. Las tasas de supervivencia son las mismas. El linfoma de Hodgkin es uno de los pocos cánceres en los que las posibilidades de curación son altas en todas las etapas. Unos meses de retraso en el tratamiento durante el embarazo no alteran demasiado los resultados del tratamiento. Mantener a su bebé es una opción definitiva y pocas mujeres embarazadas lo dejarán pasar.