La prueba de Papanicolaou es una prueba ginecológica de rutina que generalmente se realiza durante su examen anual. La prueba busca células anormales que podrían indicar cáncer de cuello uterino.
Las mujeres con síndrome de ovario poliquístico (SOP) no corren un mayor riesgo de tener una prueba de Papanicolaou anormal o cáncer de cuello uterino y no necesitan que la prueba se realice con más frecuencia. Sin embargo, eso no significa que pueda omitir su examen anual y la prueba de Papanicolaou regular. Su médico podrá aconsejarle sobre la frecuencia con la que debe realizarse una prueba de Papanicolaou.
Su médico considerará incluir su edad, historial médico y sexual, y los resultados de pruebas de Papanicolaou anteriores. Si está sano, tiene más de 21 años y nunca ha tenido una prueba de Papanicolaou anormal, es posible que su médico solo le recomiende que se haga una cada dos o tres años.1
Si alguna vez tuvo un Papanicolaou anormal, su médico puede recomendar que se haga una prueba cada año o incluso cada cuatro a seis meses. Algunos médicos realizarán la prueba todos los años como parte de su visita de control de la mujer, independientemente de su edad e historial médico.
¿Para qué sirve una prueba de Papanicolaou?
Durante una prueba de Papanicolaou, su médico tomará un hisopo y deslizará el interior del canal cervical para tomar una muestra de las células en el cuello uterino. Un técnico de laboratorio especialmente capacitado examinará las células y determinará si se ven como células cervicales sanas, o si están comenzando a verse anormales o cancerosas.
A veces, su médico también solicitará que la muestra se analice para detectar el VPH o el virus del papiloma humano. Algunas cepas del VPH están relacionadas con el desarrollo de cáncer de cuello uterino más adelante en la vida; esta prueba de VPH solo buscará aquellos específicos
Reducir el riesgo de cáncer de cuello uterino
Hay varios factores de riesgo asociados con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino. Las acciones que puede tomar para reducir ese riesgo incluyen:
- Dejar de fumar. Las mujeres que fuman tienen más probabilidades de desarrollar cáncer de cuello uterino, entre otros problemas de salud. Si fuma, hable con su médico sobre un programa para dejar de fumar o busque otras formas de hacer que dejar de fumar sea más fácil.
- Vacunar. Existe una vacuna contra el VPH que puede reducir en gran medida el riesgo de cáncer de cuello uterino. Habla con tu médico sobre si eres un buen candidato para recibirlo y, si lo eres, ponte la vacuna.
- Visite a su médico con regularidad. Hacerse pruebas de Papanicolaou con regularidad (según el consejo y la discreción de su médico) es crucial para detectar un posible cáncer de cuello uterino en una etapa temprana de su desarrollo.
- Uso de preservativos. Cuantas más parejas sexuales tenga una mujer, más probabilidades tendrá de estar expuesta al VPH.3 Esto es especialmente cierto en el caso de las mujeres con síndrome de ovario poliquístico que toman la píldora o no menstrúan. El hecho de que sea poco probable que quede embarazada no significa que deba evitar el uso de métodos anticonceptivos. Sigue siendo extremadamente importante utilizar una forma de anticoncepción de barrera (como un condón) para prevenir la transmisión de infecciones de transmisión sexual.
¿Qué pasa si tengo un Papanicolaou anormal?
Que no cunda el pánico. El hecho de que los resultados de su prueba de Papanicolaou fueron anormales, no significa que tenga cáncer de cuello uterino. Simplemente significa que se detectaron células anormales en el canal cervical.
Dependiendo del grado de anomalía y del tipo de cambios celulares que se detectaron en el frotis, el médico puede recomendar pruebas más frecuentes con un enfoque de observar y ver, o puede realizar más pruebas tomando una biopsia del cuello uterino.