Las enfermedades de transmisión sexual, o ETS, son enfermedades que se transmiten principalmente a través del contacto sexual. Las ETS pueden ser bacterianas, como clamidia, gonorrea y sífilis, o virales, como herpes, VIH y VPH. La transmisión puede involucrar fluidos corporales (sangre, saliva, semen, secreciones vaginales) o contacto directo de piel a piel. También es posible que una madre transmita algunas ETS a su hijo en el útero, durante el parto o al amamantar.
El uso constante de condones y otras barreras puede ayudar a prevenir las ETS, pero no son una garantía ni son igualmente eficaces para todas las infecciones. Si bien la abstinencia es la única forma de prevenir las ETS por completo, conocer los factores de riesgo de transmisión puede ayudarlo a protegerse si es sexualmente activo.