¿Sabías que el cáncer de piel es uno de los tipos de cáncer más prevenibles? Ser inteligente al sol y revisar su piel una vez al mes en busca de lunares o manchas sospechosas es una de las mejores maneras de mantener su piel sana y libre de cáncer.1
Al menos una vez al año, una persona debe someterse a un examen clínico de la piel, ya sea por su proveedor habitual o por un dermatólogo. Un examen clínico de la piel es un examen visual de la piel realizado por un profesional de la salud capacitado. Si bien esto no es un problema para quienes tienen excelentes planes de seguro médico, hay muchas personas que no tienen seguro médico o cuyo seguro no cubre dicha visita.
Cómo y dónde obtener una prueba de detección gratuita
A través del programa nacional de detección de cáncer de piel / melanoma de la Academia Estadounidense de Dermatología, los médicos voluntarios realizan pruebas de detección de cáncer de piel sin costo alguno. Puede encontrar cuándo y dónde se llevan a cabo las proyecciones gratuitas visitando el sitio web de la Academia.
Cómo realizar correctamente un autoexamen
Algunas de estas pruebas de detección del cáncer de piel están cubiertas por las aseguradoras de salud. Sin embargo, si no tiene seguro médico o no puede pagar un viaje al médico para un examen clínico de la piel, todavía hay formas de protegerse contra el cáncer de piel mediante autoexámenes. Puede realizar un autoexamen en cualquier momento y es rápido y gratuito. Además, es probable que esté más familiarizado con su propia piel que cualquier otra persona, por lo que le resultará más fácil detectar posibles problemas.
Al realizar un autoexamen, asegúrese de revisar todas las áreas de su cuerpo, incluidas las áreas que normalmente no puede ver.2 Es posible que necesite espejos para revisar adecuadamente todas las áreas. Revise sus brazos, manos, piernas y pies, así como su pecho. El espejo puede ser necesario para ver su espalda completamente. También es posible que necesite un peine para revisar debajo de su cabello.
Hay varias cosas que debe tener en cuenta al examinar su propia piel para detectar posibles signos de cáncer. Por lo general, está buscando cualquier cambio que ocurra con el tiempo en las marcas de su piel.1 Para hacer esto, debe familiarizarse con los lunares y las marcas en su piel, para poder reconocer los cambios.
Los signos de advertencia específicos incluyen nuevas manchas rojas u oscuras en la piel, nuevas protuberancias firmes de color carne, llagas sangrantes que no se curan por sí solas después de un par de semanas, así como cambios en el tamaño, la forma, el color, o la sensación de un lunar.1 Las señales de advertencia en un lunar pueden incluir un lunar que duele o pica, mide más de 6 milímetros de ancho, tiene una forma extraña o tiene varios colores.